MOTOR DE EXPLOSIÓN
El motor de explosión, también llamado de combustión interna, utiliza la explosión de un combustible para expandir un gas empujando así un pistón y desarrollando un trabajo. En 1860 Etienne Lenoir creó el primer motor de combustión interna quemando gas dentro de un cilindro. En 1876 Nikolaus August Otto construyó el primer motor de cuatro tiempos que utilizaba la gasolina como combustible.
Las máquinas térmicas son dispositivos mecánicos que aprovechan una fuente de calor para realizar un trabajo mecánico. Pueden ser de combustión externa o interna.
Las máquinas térmicas de combustión externa aprovechan la fuerza expansiva del vapor de agua generado en un foco emisor situado en el exterior de la propia máquina para realizar trabajo. Un ejemplo es la máquina de vapor.
Las máquinas térmicas de combustión interna, o de explosión, aprovechan la fuerza expansiva de los gases de una reacción química , dentro de la propia máquina, para transformarla en trabajo.
En función del combustible que utilicen, podemos encontrarnos dos tipos de motores para estas máquinas:
-Motores Otto: El combustible es la gasolina y la combustión es producida por una chispa
-Motores diesel: El combustible es gasóleo y la combustión es producida por una compresión
El rendimiento de una máquina térmica es el cociente entre el trabajo mecánico realizado y la energía tomada del foco caliente.
El rendimiento o eficiencia de una máquina térmica es la relación entre la energía que deseamos obtener de dicha máquina (trabajo realizado) y la energía consumida en su funcionamiento (energía suministrada).
En los automóviles, el rendimiento oscila entre el 20% y el 25% de la energía suministrada. Por lo tanto el 75% de la energía se libera a la atmósfera en forma de calor.
El rendimiento de una máquina térmica de vapor, funcionando en condiciones óptimas se aproxima al 5%, con lo que la energía liberada en forma de calor sería el 95%.
El ejemplo más importante que encontramos de motor de explosión son los motores de los coches y las motos, que han desplazado por completo a las máquinas de vapor o combustión externa que tanto se utilizaron en la época de la Revolución Industrial.